17 de noviembre de 2007


"99 Cents II, Diptych"

Pueden creer que esta foto es la más cara del mundo? Han pagado por ella más de 3 millones de dólares. a obra, titulada "99 Cents II, Diptych", pertenece al reconocido artista alemán Andreas Gursky (51) y fue vendida por la casa de subastas Sotheby’s, en Londres.
El fotógrafo desplazó así al anterior récord mundial de 2,9 millones de dólares que alcanzó una obra de Edward Steichen, llamada "The Pond Moonlight", tomada en Long Island en 1904.
Nacido en la ciudad de Leipzig, Andreas Gursky tuvo su primer contacto con la fotografía a través de su padre, reconocido fotógrafo. Sin embargo, no pensaba seguir este oficio hasta que entró a la Kunstakademie (escuela de arte) en Düsseldorf donde comenzó su carrera artística.
Gursky ha montado exposiciones individuales en el MoMA de Nueva York y en el Centre Georges Pompidou de París, para nombrar las más importantes; y la Colección del Deutsche Bank cuenta con algunas de sus fotografías.

Pegada la reseña anterior, ahora me toca decir a mí que encuentro la cosa más descabellada del mundo esto. Creo que saben bien las razones que puedo argumentar. También conozco lo que me podrían refutar. Ahorrémonos todo ese diálogo y concluyamos que existen mil millones de mejores fotografías que esta y que existe la misma cifra elevada al cuadrado de mejores maneras de gastar ese dinero.

1 comentarios:

Jacquelinne Garzo dijo...

Bueno Reijavo, después de tu apreciación personal no queda mucho que argumentar y pareciera no ser importante lo que se pueda refutar, por lo tanto no me queda más que estar completamente de acuerdo contigo y entonces me ahorro un diálogo absurdo.

Pero es verdad, estoy de acuerdo. Dentro del mundo de la fotografía casi no hay límites. Imagínate que si de un solo objeto podemos hacer miles de tomas desde distintos ángulos, distancias, encuadres y diversos parámetros técnicos. Si añadimos a esto la revolución de la fotografía digital
que con todos los plus que ofrece el mercado se vuelve completamente ilimitada, la fotografía de tu entrada no tiene nada del otro mundo.
Conceptualmente tiene mucho sentido, es decir, algo nos quiere decir el fotógrafo con su trabajo y el mensaje (según yo) es claro y fuertemente directo, pero de ahí a pagar 3 millones de dólares...el descabellado aquí es quien la compró. Aunque mira, si fuese una empresa publicitaria o algo así, sería una muy buena inversión considerando el récord de la subasta.
En cualquier caso, bien por el fotógrafo.

Te felicito la iniciativa del blog. Es interesante lo que aquí comentas y el enfoque crítico y sátiro con que estás analizando, me gusta. Concluye mi monólogo.
Saludos.